La labor educativa, de creación de tejido social y de incidencia política es un esfuerzo constante en muchas regiones del país como un eficaz complemento al proceso productivo. El sector ecológico evoluciona permanentemente en nuevos subsectores y tendencias como moda, cosmética y fitofarmacia. Lo mismo puede decirse de la incorporación o combinación de sellos sociales, étnicos y ambientales ante los nuevos patrones de consumo.